PROGRAMAS PERMITEN COMPATIBILIZAR FAMILIA, TRABAJO Y ESTUDIOS
En un mundo cada vez más competitivo, más y más universidades incorporan programas en las modalidades Advance y Executive a su oferta académica, para satisfacer la necesidad de las personas ya sea de retomar estudios universitarios incompletos o bien, cursar una segunda carrera de pregrado en menor tiempo.
Siempre quiso ser actriz profesional, pero la tradicional inestabilidad laboral que se le adjudica a las artes llevó a Andrea —al finalizar el colegio— a estudiar periodismo. Sin
embargo, su pasión por la actuación se mantuvo intacta. De ahí que decidiera realizar un curso de teatro en la Academia de Fernando González.
Los dos años en que cursó cuatro niveles —básico, intermedio, avanzado y taller de montaje— los disfrutó al máximo, pero quería más. Quería tener el título que la acreditara como una profesional de las tablas.
Por eso, postuló con notas y certificados en mano a un programa especial de titulación en una universidad privada, que le reconocía lo ya aprendido. Así, en un año, Andrea obtuvo su segundo título.
«Tener el título de actriz profesional era un anhelo personal, un desafío interno. Pese a que ya no actúo, queda para toda la vida el acervo personal de conocimiento. Me encanta estudiar y aún lo sigo haciendo», afirma.
Esta es una de las ventajas de los programas Advance: profesionalizar lo ya aprendido o bien entregar la posibilidad de que quien, más allá de las razones, no pudo culminar la educación superior retome sus estudios. Todo en un tiempo menor al tradicional de una carrera de pregrado, lo que aparece como una buena oportunidad de conciliar familia, estudio y trabajo.
Y dada las crecientes demandas de un mercado laboral competitivo es que cada vez más universidades incorporan programas en las modalidades Advance y Executive a su oferta académica.
Luz María González, gerente general de eClass, explica que la modalidad Advance corresponde a programas de pregrado más breves que los tradicionales, especialmente diseñados para que personas con experiencia laboral, título profesional y/o con aprendizajes previos obtengan una segunda carrera en un tiempo más breve.
La modalidad Executive, en tanto, son programas de pregrado diseñados para adultos que ingresan a la educación superior por primera vez o que tienen un título profesional o técnico, estudios parciales, y quieren retomar estudios o estudiar otra carrera.
IMPULSO
Es que, detalla Marisol Aguayo, directora de Talent Solutions Right Management, «a lo largo de todo el ciclo de vida del trabajador es fundamental que continúen en un proceso de aprendizaje continuo. Por lo tanto, estas carreras están dirigidas a todos los profesionales que quieran potenciar su carrera profesional, en cualquier momento de su ciclo de vida laboral».
De hecho, cursar este tipo de programas cuando ya se tiene experiencia laboral, ayuda a comprender cómo esos nuevos conocimientos se pueden aplicar en el mundo real.
Incluso, hay profesionales que toman esta alternativa de educación para reinventarse laboralmente, lo que ha sido notorio en los dos últimos años como consecuencia de la pandemia.
En suma, añade Luz María González, los programas advance, ya sea impartidos por universidades o por instituciones como eClass, están enfocados en «entregar competencias para el mundo laboral actual, manteniendo a los alumnos al tanto de los cambios y nuevas tendencias, lo que complementa los estudios previos, ya sea con mayor profundidad en la misma área o en una temática complementaria».
CARACTERÍSTICAS
Por tratarse de carreras más cortas, se logra —señala Carlos Henríquez, director comercial de SOS Group— optimizar el tiempo. A ello también contribuye que son programas más flexibles, tanto en términos de sistema de clases —presencialidad, híbrido u online—como de la cantidad de días que se requieren para participar en él. Es decir, son ideales para quienes están trabajando y no pueden asistir todos los días a la universidad o conectarse a diario a las salas virtuales.
Otra particularidad es que, al tratarse de personas que estudian y trabajan, los profesores usan metodologías de enseñanza que favorecen que los alumnos interioricen conocimientos.
También, por tener módulos sincrónicos y asincrónicos, los estudiantes pueden avanzar de acuerdo con su disponibilidad de tiempo.
Nicolás Compte, gerente de Personas de Adexus, agrega que estos programas flexibilizan la estructura de aprendizaje, muchas veces orientado a lo práctico. Asimismo, en muchas casas universitarias aparece como gran opción llevar a cabo este sistema de manera remota o mixta, lo cual ahorra tiempos, costes y traslados».
FORMATO
En el contexto de confinamiento que se vivió en 2020 como consecuencia del covid-19, no pocos profesionales decidieron que, sin tener que dedicar tiempo a traslados, podían volver a estudiar con la comodidad de la educación online, que adquirió una relevancia tal que muchas universidades ya han incorporado este formato a su oferta de programas.
De hecho, afirma Catalina Araya, directora de Educación en Fundación País Digital, «hoy distintas universidades están comenzando a abrir carreras completamente en formato digital, lo cual antes no era algo recurrente y menos optar por estudiar en formato online. Es un cambio de paradigma que está ocurriendo».
El interés por los programas online queda de manifiesto en el Informe de Matrícula de Educación Superior 2021, elaborado por el Servicio de Información de Educación Superior (SIES), del Ministerio de Educación, que concluye que «el mayor incremento del último año en la Matrícula Total de Pregrado se refleja en los programas A Distancia (51,1%) y Semipresenciales (12,3%). En el caso de los programas A Distancia o no presenciales, destaca el alza de 178,5% en los últimos cinco años. En números significa que si en 2017 los matriculados en programas online eran 28.500, la cifra llegó a 52.517 el año pasado.
Así, los programas online han ganado terreno, pues —por un lado— permiten un mayor grado de personalización en cuanto a metodologías y contenidos, y al mismo tiempo, permiten manejar de mejor manera los tiempos de estudio y de esta manera, compatibilizarlos con otras activklades. Es que, con la tecnología como aliado, es posible estudiar desde cualquier lugar y con la libertad de acceder al conocimiento sin horario definido.
NO SOLO TEORÍA
Para avanzar en el mundo laboral ya no bastan los conocimientos teóricos, se requieren también otras habilidades. Se trata de las llamadas «soft skills» que están relacionadas con lo social y la comunicación y que están siendo cada vez más demandadas por las organizaciones.
Así lo confirman expertos en reclutamiento, que coinciden en que estas cualidades ya forman parte de los procesos de selección, pues permiten enfrentar adecuadamente un entorno cambiante, en los cuales cualidades como liderazgo, empatía y resiliencia son esenciales.
De ahí que las universidades estén incluyendo en sus programas de pre y posgrado contenido relacionado con gestión del tiempo o comunicación efectiva, entre otros.
Fuente: https://digital.elmercurio.com/2022/01/29/EE-STD-Z/IE42V5H1#zoom=page-width